Hola a todos. Hoy
les quiero compartir una experiencia muy terrible que viví cuando era niño.
Tenía unos 10 años y un día caminando por la calle San Diego, encontré una
librería maravillosa y antigua. Sus muros sucios y su olor azumagado le daban
un toque especial, como esas librerías antiguas y roñosas que uno ve en las
películas. Me puse a mirar los libros y encontré una sección de ciencias
ocultas, no podía creer lo que estaba viendo, eran libros increíbles, sobre
todo para mi propósito más secreto…
La verdad es que
era muy inocente a esa edad y tenía una admiración por los superhéroes de los
comics y soñaba con tener poderes sobrenaturales, ese era mi propósito secreto.
Y cuando vi los libros de ciencias ocultas, me di cuenta de que ellos ofrecían
medios para obtener esos poderes.
Comencé con un
libro de hipnotismo que me compré en esa librería. Y seguí sus instrucciones.
En las noches miraba puntos fijos durante varios minutos para practicar a mi
concentración y también para adquirir el poder del hipnotismo. Luego me puse a
mirar fijamente a las personas en la calle para desarrollar mi capacidad de
sugestión. Obviamente era muy incomodo para ellos, pero según mi libro, era la
única forma de desarrollar el poder de la hipnosis, aunque debo reconocer que
nunca lo conseguí. Frustrado por mi fracaso, comencé a investigar otros libros
de ciencias ocultas.
Fue así como me
compre mi primer libro de ciencias ocultas, el famoso Libro de San Cipriano. Cuando
lo encontré en la librería antigua, me puse a ver su índice y leí algo
sorprendente. El índice indicaba las páginas donde se explicaba como volar,
como hacerse invisible, como enamorar a una persona, como hacerse millonario,
etc, etc, etc. Era claramente el libro que me ayudaría a obtener poderes
sobrenaturales. Era lo que estaba buscando, al menos eso pensé al principio…
Cuando llegué a mi
casa, me puse a leerlo de inmediato. Pero fue ahí cuando encontré mi primera
decepción. Era un libre espantoso y demencial. Para lograr las cosas que
quería, había que hacer conjuros y hechizos que involucraba matar animales, y
hacer cosas raras con oraciones muy extrañas. Por ejemplo, para volar había que
asesinar a un animal (no me acuerdo cual) y recitar una oración a las 12 de la
noche. En ese momento, según el libro, aparecerían dos seres que me tomarían de
mis brazos y me llevarían por los aires. Pero el libro advertía que durante el
viaje no debía abrir mis ojos, porque de lo contrario, esos seres me soltarían
y me dejarían caer. Otra receta demencial era la recomendada para ser
millonario. Recuerdo que había que matar a un gato negro, extraerle su ojo e
introducirlo en un huevo de gallina. Luego había que meter el huevo en bosta de
caballo para que se incubara, y había que recitar una oración espantosa. Luego
de un tiempo, según el libro, emergería un ser que me daría toda la riqueza que
quisiera. Pero si lo descuidaba, se convertiría en un enemigo…
Bueno, nunca
realicé esos hechizos porque los encontré demenciales. Sin embargo, le mostré
el libro a varios compañeros del colegio los cuales se impactaron por el contenido
aberrante y bizarro del libro. Incluso uno de ellos me lo pidió prestado por
algunos días para leer su perturbarnte contenido. Fue así como un interés un
tanto morboso por ese libro surgió entre nosotros. No queríamos hacer conjuros,
pero nos gustaba leer las atrocidades por lo fuerte que eran, ciertamente un
interés morboso infantil.
Un día mi compañero
me comentó que había averiguado acerca de la existencia de otro libro mucho más
terrible, demencial, bizarro y cruel que el libro de San Cipriano. De hecho,
este nuevo libro contenía el libro de San Cipriano, pero tenía muchas otras
cosas impactantes. La morbosidad por leer lo que tenía ese libro fue
irresistible, y fui a buscarlo a la librería antigua….y lo encontré. Era el
Libro Infernal. Estaba muy contento con mi compra porque se lo mostraría a mi
amigo, iba a ser una buena oportunidad de reírnos por sus contenidos
aberrantes.
Cuando llegué a la
casa, me puse a leerlo de inmediato, como lo hacía cada vez que adquiría un
nuevo libro. Ya en la noche, lo dejé en el velador y apagué la luz para dormir.
Había pasado algún tiempo cuando sorpresivamente comencé a sentir pasos dentro
del dormitorio, pasos fuertes y aterradores... El miedo me envolvió y paralizó.
Mi corazón latía fuerte y comencé a sudar mientras seguía escuchando los pasos
aterradores en la oscuridad de mi cuarto. Me envalentoné y prendí la luz, y
cuando miré, no había nadie, absolutamente nadie. Fue en ese instante cuando que me
di cuenta de que la compra de ese libro había sido un gran error. De algo que
parecía un juego morboso, se convirtió en una amenaza real.
Esa noche, como era
de esperar, dormí con mis padres por el miedo que tenía. Y en la mañana
siguiente tomé todos mis libros de ciencias ocultas e hipnotismo y los queme en
el patio. De ahí nunca más sentí nada, pero aprendí una gran lección: jugar con
lo desconocido, por muy buenas intenciones que se tengan, podría ser peligroso…
Daniel May
Totalmente cierto amigo la misma experiencia vivió mi padre cuando adquirió por un amigo el libro infernal y me detallo cada conjuro que estaba en ese libro
ReplyDeleteSaludos, mi abuela también me contó que durante el tiempo que duro su lectura la visitaba un perro negro, y lei que otras personas también lo han visto además de escuchar cosas extrañas
ReplyDeleteUn amigo mio le pasaron eventos extraños con el san cipriano
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